Llueve…
Esta mañana al despertar, vi como la mañana despuntaba amarillenta, con tonalidades grises, sin apenas luz…. La mañana tenia ganas de llorar y lo demostró con la lluvia.
Me gusta la lluvia un domingo por la mañana, y suele traerme un regalo, la melancolía.
Es como un pequeño placer en un tiempo determinado que sentimos cuando estamos tristes.
La melancolía no tiene porque ser una enfermedad, es simplemente el hecho de levantarnos un día con ella y al día siguiente volver a ser la misma.
La melancolía, es un sentir interno fluido que todo lo llena en nuestro ser, amargo y dulce a la vez, es algo intenso que a todos nos toca vivir de vez en cuando, si no que se lo pregunten al Quijote, que fue nuestro melancólico por excelencia del Siglo de Oro…
No te asustes si un día te levantas así, aprovecha esos momentos, será pasajero y mañana volverás a ser tú.
Y la lluvia sigue cayendo…
Os dejo un vídeo con una canción maravillosa, dicen que una imagen vale más que mil palabras...
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